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Elegir cerámica para revestir y pavimentar el baño es una decisión inteligente que combina funcionalidad y estilo. Este material destaca por su alta resistencia al agua y a las manchas, lo que lo hace ideal para un espacio donde la humedad es constante. Su fácil mantenimiento, durabilidad y resistencia al contacto frecuente con el agua y los productos de limpieza garantizan un espacio siempre limpio y seguro, ya que además evita la proliferación de hongos y bacterias. A esto se suman sus propiedades antideslizantes, que contribuyen a crear un entorno cómodo y saludable.

Más allá de sus cualidades técnicas, la cerámica ofrece una gran variedad de diseños, colores y formatos que permiten personalizar el baño, transformándolo en un lugar acogedor y con personalidad única. Por ello, la cerámica es la opción ideal para lograr baños duraderos, prácticos y estéticos.

A continuación, ASCER nos presenta una serie de ideas que servirán de inspiración a la hora de plantear una reforma en este espacio del hogar.

A todo color

Para crear un baño realmente original, es fundamental explorar las infinitas posibilidades que ofrecen las piezas cerámicas en cuanto a colores. Las empresas cerámicas españolas proponen una amplia gama de tonos vibrantes y llamativos que van más allá de los colores tradicionales habitualmente usados en baños. Gracias a esta diversidad cromática, es posible crear espacios únicos y llenos de personalidad.

Combinaciones únicas

Crear composiciones cerámicas que mezclan distintos acabados es una forma ideal de aportar carácter y definición al baño. Además, distribuir las baldosas por zonas diferenciadas permite delimitar espacios, como por ejemplo utilizar piezas con acabado marmoleado para la zona de la ducha y monocolor en el resto del baño, logrando así rincones singulares y con personalidad.

Blue Love

El color azul nos invita a recrear la frescura y la profundidad del océano, por ello su utilización en espacios como el baño es ideal si queremos conseguir un ambiente lleno de vitalidad y energía. Podemos revestir el espacio de manera uniforme con piezas de gran formato o destacar una zona específica. Este color en tendencia ofrece infinitas posibilidades para diseñar espacios que capturan la atención y crean un impacto visual único.

Efecto mármol

Los acabados marmoleados en cerámica siguen siendo una elección que no pasa de moda, por ello se convierte en una apuesta segura para el baño. Al optar por tonalidades oscuras. con las vetas características que nos aporta este acabado, podemos transformar las paredes y suelos, ofreciendo una sensación de profundidad y creando un ambiente elegante y lleno de carácter.

Formatos infinitos

La cerámica nos ofrece una infinidad de formatos que permiten crear composiciones únicas donde la funcionalidad se une con la estética. La variedad de formas multiplica las posibilidades de diseño, transformando suelos y paredes en auténticos lienzos.

Refugio de calma

Optar por piezas cerámicas en tonos neutros para revestir el baño es una excelente manera de crear un ambiente lleno de luminosidad y amplitud. Colores como el blanco, el beige o el gris suave no solo aportan elegancia y un carácter atemporal, sino que también transmiten una sensación de calma y tranquilidad, ideal para convertir el baño en un espacio relajante. Estas tonalidades neutras facilitan además la integración con otros elementos decorativos, permitiendo jugar con texturas y detalles sutiles que realzan la armonía del conjunto.