Según cifras aportadas por el Ministerio del Interior, las denuncias por 'okupación' aumentaron en Cataluña un 69,3% en 2019 frente a las registradas en 2015. Si comparamos los últimos datos cotejando por comunidades autónomas, Cataluña es la más afectada, con 3.611 denuncias en el primer semestre de 2020 frente a las 3.190 del mismo periodo de 2019. Según epdata, las denuncias por okupación de inmuebles se han incrementado en España un 40,9% en cuatro años, pasando de 10.376 hechos conocidos por las Fuerzas de Seguridad en 2015 a los 14.621 con que se acabó en 2019. Frente a esta creciente preocupación social por la ocupación ilegal de inmuebles, se están implementando nuevas soluciones para frenar a los ‘okupas’.
Norman Sánchez , director general de Watchman Door, compañía especializada en control de accesos, explica que el fenómeno de la ‘okupación’ está generando un interés creciente por la primera cerradura antiokupa del mercado. Si bien las cerraduras inteligentes, controladas vía Bluetooth desde cualquier dispositivo existen desde hace tiempo, aún no se trata de un producto generalizado. "El fenómeno okupa está generando que muchas personas y empresas afectadas busquen soluciones que dificulten el acceso a los inmuebles a los okupas", explica Norman. "Nuestra Cerradura Antiokupa es imposible de abrir mediante un destornillador o cualquier otra herramienta". Además, se trata de un dispositivo del que el propietario tiene control remoto en tiempo real detectando cualquier tipo de vibración o intrusión (si alguien entra o lo intenta, sale, intenta accionar el acceso, etc.) y enviando una alerta al móvil. Es una cerradura invisible desde fuera, siendo imposible saber a qué altura de la puerta está colocada.
Las
soluciones de Watchman Door se aplican en cualquier tipo de acceso: entradas a portales de edificios, ascensores, domicilios particulares, escaparates, expositores y muebles de retail, máquinas de vending, puertas de párquings, de hoteles, de apartamentos turísticos, etc.
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