¿Quién dijo que lo clásico no puede ser moderno? El mejor ejemplo que responde a esta pregunta es el sistema
Shower Technology aplicado a la serie
Tres-Clasic .
Dos productos que, a priori, pueden ser considerados antagónicos, se unen para demostrar que lo clásico y lo moderno se llevan más que bien. Con
Shower Technology para la serie
Tres-Clasic ,
Tres Grifería ofrece la posibilidad de disfrutar de la última tecnología en un producto de estética vintage.
Las ventajas de la tecnología táctil Shower Technology es un sistema de ducha que funciona gracias a un panel digital táctil en el que el usuario puede programar tanto la temperatura del agua como su caudal. Además, siendo termostático, el mismo sistema equilibra la temperatura según las necesidades del cliente.
La pantalla muestra mediante números, colores e íconos las distintas opciones con las que cuenta este sistema. Tal es el caso de la tecnología "Warm System" (la función que permite saber cuando el agua ha alcanzado la temperatura que ha seleccionado la persona que va a ducharse o bañarse).
Moderno, cómodo y funcional, lo más destacado de
Shower Technology es que, con sólo un clic, el usuario puede hacer uso de prestaciones competitivas de manera fácil.
Una propuesta minimalista y tradicional Con acabados en cromo, acero, latón viejo u oro, los cuartos de baño lucen los valores tradicionales conviviendo en armonía con un producto de alta tecnología, capaz de resolver las necesidades de nuestra era.
Shower Technology & Tres-Clasic está disponible para duchas o bañeras que tengan dos o tres vías de salida de agua. También para kits con rociador clásico, tanto en su presentación de pared como de techo.
Y, si hablamos de instalación, los técnicos se benefician de las ventajas y la sencillez que caracteriza
Shower Technology . La matriz de este sistema –la centralita termostática electrónica–, se instala con mínimo esfuerzo y se conecta al área de ducha sencillamente con un cable. Con el objetivo de optimizar los espacios, dicha centralita se puede ubicar en el falso techo, dentro de muebles o, en el lavadero, la terraza e incluso, utilizando huecos sin uso de la bañera.
La mínima instalación que necesita este producto tanto en paredes de pladur como en paredes de obra, facilitan y reducen el tiempo y el coste del profesional. Es por esto que los instaladores que lo han instalado una vez, repiten con este producto.