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Cada vez son más los lugares donde se pueden encontrar puertas automáticas, y es que sus ventajas son enormes, especialmente en aquellos recintos, edificios o monumentos en los que existe un gran flujo de personas.

Los antiguos monumentos suscitan un gran interés por parte de todos aquellos ávidos de conocimiento y de historia, recibiendo miles de visitantes cada año. Es precisamente derivado de este enorme flujo de personas donde surge la necesidad de incorporar sistemas de ahorro energético, pues mantener la temperatura en estos edificios es prioritario tanto para la conservación de las obras que se albergan en su interior como para el bienestar de los visitantes.

¿Cómo pueden ayudar las puertas automáticas en los edificios históricos?

Tal y como se ha mencionado anteriormente, son los edificios más emblemáticos e históricos los que suelen albergar obras de arte de gran relevancia tanto económica como cultural, por lo que su conservación es de vital importancia en la sociedad actual. Para que estas obras puedan ser debidamente conservadas se ha de cumplir con unos criterios de luz, temperatura y humedad, lo que supone un gasto extra en iluminación y climatización entre otros. Las puertas automáticas en este caso van a ser de gran ayuda ya que pueden delimitar espacios, controlar el flujo de personas e impedir los intercambios de temperatura entre el exterior y el interior, así como entre diferentes salas, lo que a su vez va a traducirse en una reducción considerable del gasto energético y de las emisiones de CO2.

Además de delimitar las estancias y reducir los costos derivados de su actividad, los edificios históricos del siglo XXI se deben caracterizar por poder ofrecer tanto sus servicios como las obras culturales que albergan en su interior a todo el mundo, lo que se conoce como accesibilidad universal. Estos monumentos deben de ser completamente accesibles a cualquier persona, independientemente de su condición física o psíquica, por lo que las puertas automáticas van a jugar un papel clave en esta inclusión social pues son elementos eliminadores de barreras. Mediante la instalación de estos mecanismos y de sus pertinentes rampas y pasamanos, las personas con movilidad reducida van a poder hacer uso y disfrute de estas históricas instalaciones sin necesidad de hacer un esfuerzo extra, garantizándose de este modo que la cultura va a poder llegar a todo aquel que lo desee.

Otra ventaja añadida al uso de estos automatismos es que pueden ser colocadas en cualquier lugar gracias a su elegante diseño y al poco espacio que ocupan, asegurando así que el edificio no sufrirá ningún desperfecto derivado de su uso e instalación.

Las puertas automáticas pueden ser fácilmente instaladas en cualquier edificio histórico, como ejemplo podemos destacar el ejemplo de la Sagrada Familia de Barcelona, en el que Manusa ha instalado recientemente tres Express Gates (pasillos de acceso controlado) y 8 puertas automáticas (más las 5 ya existentes) a lo largo del templo, lo que garantiza un perfecto uso y control de las instalaciones, así como una mejora significativa para los visitantes.