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¿Quién dijo que un cuarto de baño pequeño no podía ser espacioso y coqueto? A menudo, especialmente en pisos de nueva construcción, el cuarto de baño es la habitación más pequeña de la casa. Para sacarle el máximo partido y crear un ambiente de diseño y acogedor, Geberit nos propone las Soluciones Geberit Omega: una gama de productos que proporciona versatilidad al cuarto de baño.

La nueva cisterna empotrada Geberit Omega ha sido diseñada especialmente para que encaje en cualquier situación de construcción, sobre todo cuando tenemos poca altura a disposición. Al tener solo 82 cm de altura, Geberit Omega es ideal para instalar el inodoro bajo el alféizar de una ventana o bajo techos abuhardillados.

Con esta solución, además, Geberit ofrece la posibilidad de instalar el pulsador que activa la descarga del agua en la parte frontal o en la parte superior de la cisterna, según los gustos y necesidades. Además, las posibilidades de diseño se amplían con la gama Omega de pulsadores. Más pequeños, con nuevos materiales y diseños, dan un toque original al baño.

El pulsador Geberit Omega20 presenta dos botones redondos con un anillo alrededor y está disponible en seis colores distintos. También se ofrece en seis colores el pulsador Geberit Omega30, la versión con dos botones rectangulares, que incorpora una elegante banda horizontal en cada botón. Finalmente, Geberit Omega60 es el modelo más pequeño y sofisticado, ya que su superficie queda enrasada con el revestimiento de la pared y no sobresale, encajando a la perfección en cualquier cuarto de baño.

Asimismo, la importancia del pulsador no solo es estética. También permite ahorrar en la factura del agua. Para ayudar a ello, toda la gama de pulsadores Geberit Omega está equipada con doble descarga (ajustable hasta 3 litros de agua para la media descarga y 4,5 o 6 litros en el caso de la descarga completa).

A través del hueco donde se coloca el pulsador se accede a los mecanismos que realizan la descarga del agua de manera silenciosa y segura, así que el mantenimiento de las cisternas empotradas Geberit es muy fácil. Además, al estar moldeadas en una sola pieza, son tan fiables que tienen una garantía de 10 años y una disponibilidad de recambios de al menos 25 años desde que se deja de fabricar la cisterna.

La sustitución de la cisterna vista por una solución empotrada ayuda a ganar metros útiles en el baño. Además de lograr un diseño más elegante y contemporáneo, la eliminación de la cisterna vista hace que los rincones de difícil acceso en el baño desaparezcan, facilitando así las tareas de limpieza. Si, al mismo tiempo, se combina la cisterna empotrada Geberit con un inodoro suspendido, aún es más cómodo limpiar. Y, todo ello, por un presupuesto similar a la opción tradicional con cisterna vista.