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    8 Jun '12

    El Empire State ahorra millones de dólares en el primer año del Plan de Eficiencia Energética de Johnson Controls

    El edificio más famoso del mundo prueba el proyecto para reducir el consumo energético en un 38 por ciento

    Un año después del innovador proyecto de modernización del edificio, el Empire State ha superado -antes de lo previsto- su primer año de garantía de eficiencia energética en un 5%, ahorrando 2,4 millones de dólares y estableciendo un modelo comercial para reducir costes, maximizar el retorno sobre la inversión, incrementar el valor de los bienes inmuebles y la protección del medioambiente.

    "En primer lugar, el hacer el Empire State energéticamente eficiente fue una buena decisión de negocios puesto que nos ahorró millones de dólares en el primer año", apunta Anthony Malkin, del Empire State Building. "Tenemos un modelo probado que muestra a los propietarios, inquilinos de los edificios y a los operadores cómo reducir costes y mejorar el valor de sus inmuebles mediante la integración de la eficiencia energética en las mejoras en construcción".

    El Sr. Malkin y la Iniciativa de Clinton Climate (CCI) Programa de Ciudades, socios afiliados para el Grupo de Liderazgo de Ciudades Climáticas C40, han formado una coalición de las principales organizaciones enfocadas a la eficiencia energética y a la sostenibilidad. El equipo estuvo integrado por Empire State Building, Jones Lang LaSalle (JLL), Johnson Controls (JCI), y el Instituto de Montaña de Rocky (RMI).

    "Malkin tenía una visión de llevar la innovación a su hito histórico. Los resultados están empezando a consolidarse mientras en el mismo momento se está creando un nuevo modelo a seguir para todo el mundo" dice Dave Myers, presidente de Johnson Controls, Building Efficiency. "Es muy importante hacer frente a los miles de millones de metros cuadrados de edificios de oficinas ineficientes en todo el mundo para satisfacer nuestras crecientes necesidades de energía, ahorrar dinero, crear puestos de trabajo y reducir las emisiones de gases con efecto invernadero".

    El Empire State no sólo es más eficiente, sino también estima el ahorro de 4.000 toneladas métricas de carbono, el equivalente a 750 hectáreas de bosque de pinos. Una vez que todos los espacios del edificio se reconviertan, el edificio ahorrará 4,4 millones de dólares al año, una reducción del 38% del consumo de energía que reducirá las emisiones de carbono por 105.000 toneladas métricas durante los próximos 15 años.

    "Estos prometedores resultados del primer año ponen en relieve el impacto de este emblemático proyecto global, que continúa siendo un modelo para la acción climática sostenible, no sólo para los propietarios de edificios de Nueva York, sino también en toda la red mundial de Ciudades C40", dice Terri Wills, director de Iniciativas Globales de C40. El presidente del C40 es el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg.

    "Nuestro trabajo en el Empire State demuestra que una reducción importante del consumo de energía puede ser rentable en términos de ahorro de energía y puede aumentar el atractivo de un edificio de alta calidad para los inquilinos", apunta Roy Quartararo, director internacional de Jones Lang LaSalle. "A medida que continuamos trabajando con los existentes y nuevos inquilinos, nos encontramos con que la abrumadora mayoría de gente quiere poner de su parte para reducir el consumo energético al tiempo que ofrecen beneficios económicos y que ocupan un edificio ambientalmente responsable".

    El proyecto de modernización se centró en ocho medidas innovadoras de mejora dirigidas a abordar la infraestructura central de la construcción, los espacios comunes y suites de los inquilinos. La mejora de las medidas realizadas por Johnson Controls y John Lang LaSalle, incluyeron la renovación de todas las 6.500 ventanas, una enfriadora de adaptación, la creación de nuevos controles y un sistema online de gestión energética para los inquilinos.

    Los socios del proyecto desarrollan un detallado diseño de ingeniería y Johnson Controls garantiza el ahorro de energía a través de un contrato de rendimiento de 20 millones de dólares. Con este contrato, el ahorro en el consumo de energía fruto de las mejoras de la instalación, cubre los costes del proyecto antes de la finalización del contrato. Sino se consiguen estos ahorros, Johnson Controls paga la diferencia entre el valor del consumo medio y verificado y el consumo garantizado en el marco del contrato.

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