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El fabricante de estanterías Ohra; empresa líder con presencia en toda Europa e instalaciones en los cinco continentes, viene realizando desde hace años instalaciones para el almacenamiento en altura de chapa (plana o en bobinas) y perfiles metálicos. Esto se consigue utilizando carretillas multi-direccionales (cuatro caminos) en pasillos estrechos, o cuando la ocasión lo exige transelevadores, lo que produce el milagro de multiplicar los metros cuadrados en metros cúbicos. También aunque con menos aprovechamiento de altura se puede utilizar para el desplazamiento de las unidades de carga el puente grúa, almacenando en estanterías de brazos inclinados.

Todavía es muy habitual observar en los almacenes de chapa y/o perfiles metálicos, como los materiales se depositan sobre el suelo, o sobre artilugios artesanales, que en muy pocos casos permiten aprovechar más de 1 ó 2 metros de altura de naves, que en muchos casos disponen de una altura de 8 ó 10 metros.

Para Ohra es habitual situar paquetes de perfiles metálicos en estanterías cantilever a una altura hasta 12 metros.

Esta forma de almacenamiento, además de multiplicar por la altura los metros cuadrados de la nave, tiene una ventaja fundamental, que produce un efecto inmediato sobre la eficiencia y reducción de costes en la manutención del almacén. Esto es que cada paquete tiene acceso inmediato, incluso paquetes que hace meses que no movemos (en pocos minutos tenemos el paquete en zona de picking o en zona de carga) y en cada momento sabemos donde está cada material y la cantidad exacta que tenemos en stock. ¡El inventario lo tenemos permanentemente hecho!

Las estanterías cantilever de Ohra están fabricadas en IPE, tanto columnas como ménsulas. Las columnas están punzonadas en toda su longitud, lo que permite adaptar constantemente la altura de los niveles, de acuerdo a nuestras necesidades. Otra virtud fundamental es que las ménsulas se mueven lateralmente o hacia arriba en caso de recibir un golpe imprevisto.

Esta forma de almacenar permite acopiar en una nave lo que antes estaba en varias, permitiendo desinversiones inmobiliarias o eliminar costes de oportunidad, por otra parte permite utilizar la mano de obra en operaciones de mayor valor añadido, que no en mover constantemente y sin sentido, paquetes de un lado para otro. Esto último ocurre si no nos hemos parado a pensar el costo por hora de un hombre y un medio de elevación.