La importación en 2008 del conjunto de los países de la UE de todo el mundo fue de 104,2 millones de m², con un valor de 1.724 millones de €. De estas importaciones los intercambios entre los propios países de la UE (intra-UE27) alcanzaron los 48 millones de m² (988,6 millones de €), por lo tanto si se restan del total importado se tiene que en 2008 el conjunto de los 27 países de la UE importaron de terceros países (extra-UE) casi 56 millones de m² con un valor de 735,4 millones de €. A China correspondieron 30 millones de m²; es con mucho el primer país suministrador de parquet a Europa.
Es interesante comparar estas cifras con las del año 2007, último año antes de manifestarse la recesión económica de Europa. En el año 2007, los 27 países de la UE importaron 87 millones de m², pero con un valor de 1.867 millones de €. Esto es, en m² creció la importación entre los años 2007 y 2008 casi un 20% (19,8%), y sin embargo en valor decreció el 7,7%. Los precios han sufrido una fuerte caída.
En 2007 las importaciones intra-UE fueron de 27 millones de m² con un valor de 958 millones de €. Esto es, entre 2007 y 2008 los intercambios de parquet en m² entre países de la UE crecieron de forma muy importante, el 78%, pero en valor sólo lo hicieron el 4%.
Las importaciones de China en 2007 fueron de 28 millones de m², el crecimiento de la importación entre 2007 y 2008 fue del 7%; poco importante respecto al 20% del total.
¿Qué le está pasando al sector europeo del parquet?. ¿Por qué los países de la UE del Este han decidido liberar sus stocks cuando seguramente son los que van a tener una mejor evolución de la demanda? Y, sobre todo ¿por qué esa bajada de los precios tan acusada?
Seguramente no hay una única razón, pero las plantas industriales de parquet ubicadas en los países del Este tienen una imperiosa necesidad de sacar su producción y la situación del mercado no es la más favorable, decidieron competir en precios tal vez para eliminar del mercado a las empresas marginales que se mantenían por la buena situación económica. Hay que tener en cuenta que muchas de las empresas del Este son filiales o están controladas por potentes grupos industriales de la Europa Occidental.
Una disminución del 7% de las importaciones de terceros países, casi lo mismo que la disminución de la demanda, no ha sido suficiente para equilibrar el maltrecho mercado.
La UE está haciendo un importante esfuerzo para aliviar su mercado exportando a terceros países casi 18 millones de m², pero en situación de recesión del consumo no es suficiente porque en definitiva tiene que digerir 38 millones de m², que es el exceso que viene de fuera.
En esta situación deberán disminuir la producción muchas de las empresas recientemente instaladas y con una restricción crediticia como la actual, tal vez lleve a muchas a tener que cerrar, desde luego las menos competitivas serán las primeras en caer.
El problema de nuestro sector en España es aún más complicado, la capacidad de producción ha crecido demasiado rápidamente en estos últimos 10 años y sobre todo la estructura de nuestro mercado es la menos apropiada para una situación de recesión de la demanda.
El destino del parquet europeo se distribuye con unas cuotas entre la obra nueva y la renovación del 40 y 60% respectivamente. No ocurre lo mismo en España en que hasta ahora más del 70% va a obra nueva. Hasta que no se disuelva el tapón del millón largo de viviendas que hay sin vender la obra nueva no va a tirar, por tanto la salida del sector será volcarse en el mercado de la renovación.
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