Los microorganismos están presentes en todas partes y representan un grave problema para el mantenimiento de infraestructuras destinadas a uso público o sanitario. La eficacia de la limpieza disminuye con el tiempo haciéndose necesaria una protección mayor.
Se calcula que un 10-20% de las infecciones nosocomiales se producen por transmisión aérea. Los organismos infecciosos se pueden dispersar a través de estornudos, toses y otros medios y muchos de ellos caen en alguna superficie en un breve espacio de tiempo.
Los productos
TESA Bioproof se aplican a manillas, cerraduras de control de accesos, pomos y barras antipánico. En estos casos, son productos de acero inoxidable que llevan un recubrimiento en polvo que las hace resistentes a los siguientes microorganismos:
• Staphylococcus aureus.
• Escherichia coli.
• Pseudonomonas aeruginosa.
• Enterococcus hirae.
• Candida albicans.
Iones de plata y zeolita El componente activo de este recubrimiento son "iones de plata" cubiertos de zeolita, cuya función es liberar la plata poco a poco. Las propiedades de la plata como elemento antimicrobiano son conocidas desde la antigüedad cuando ya los emperadores chinos utilizaban plata para prevenir envenenamientos (900 dC) o cuando los egipcios usaban recipientes de plata para almacenar agua (79 dC) o en los años 20 del pasado siglo, con millones de prescripciones de medicamentos conteniendo plata, o a partir de los años 60 en que se comenzaron a utilizar compuestos de plata para curar quemaduras. La plata es segura no tiene efectos tóxicos ni en personas, ni en plantas ni en animales.
Análisis llevados a cabo en la Universidad de Pavía, demostraron que a las 24 horas de la aplicación del recubrimiento antimicrobiano, resultaron eliminadas las cepas bactéricas anteriores, y 12 meses después, el poder bactericida se mantuvo inalterado salvo una mínima excepción sobre el Enteroccocus hirae donde demostró una eficacia de 99,5%.
Los productos
TESA Bioproof son ideales para colectividades y sectores domésticos, tales como: hospitales, residencias geriátricas, colegios y guarderías, estructuras de restauración, hoteles, gimnasios, viviendas y edificios con alto tráfico de personas.