Si surgen dudas, la frescura y la fácil digestión de los alimentos son difíciles de juzgar.
El control de la temperatura en los procesos productivos resulta tan crucial para la calidad como el cumplimiento de los requisitos de higiene y el mantenimiento de unas condiciones ambiente definidas cuando se manipulan alimentos. Los requisitos legales, en particular el sistema APPCC, exigen que se monitoricen de forma ininterrumpida las condiciones ambiente y la temperatura de los productos.
Una medición exacta puede ayudar en la toma de decisiones. Se corrobora que la cadena de frío no se ha interrumpido y que la temperatura y las condiciones ambiente de los productos se monitorizan y se documentan. A tal efecto,
testo dispone de soluciones de medición diseñadas para el uso práctico diario, p. ej. en bares, restaurantes, supermercados y servicios de cátering.
Soluciones de medición para cualquier área Según el parámetro y el tipo de medición,
testo dispone de la solución idónea.
•
El testo 735-2 es un termómetro de alta precisión con alarma, memoria para datos y gestión de las situaciones de medición, ideal para mediciones puntuales en cámaras frigoríficas, alimentos congelados y la monitorización de las temperaturas de cocción.
• El testo 926 es un
preciso termómetro de acción rápida apto para el uso primordialmente en cocinas industriales, hoteles, restaurantes y en la industria alimentaria.
•
La medición de la temperatura por infrarrojos se puede efectuar con los termómetros testo 826-T2 y testo 826-T4. Estos instrumentos son especialmente adecuados, entre otras cosas, para la toma rápida de la temperatura en supermercados, donde no se debe dañar el embalaje de los productos a la venta.
• El testo 106 esta diseñado para
la medición en el interior de los alimentos en aplicaciones gastronómicas, hoteles, cocinas industriales, supermercados, etc.
•
Los mini termómetros testo son muy útiles para ver la temperatura de un vistazo y también pueden medir en ambiente, en sustancias blandas o en polvo, o incluso en líquidos.
• El testo 205 es un
medidor especial de pH y °C que se maneja con una sola mano , pensado especialmente para aplicaciones en la industria cárnica.
• Para saber si todavía se puede usar o se debe reemplazar,
testo dispone de un
medidor de la calidad del aceite de cocinar . El testo 265 puede medir directamente en el aceite caliente, por lo que la frenética actividad del proceso de fritura en las cocinas de los restaurantes, cáterings o bares no se interrumpe.
• El
instrumento ideal -tanto para el transporte como para el almacenamiento- es el data logger testo 175-T1, que garantiza la documentación ininterrumpida de la totalidad de la cadena de frío.
• El nuevo
sistema de adquisición de datos testo Saveris™ permite la monitorización digital de los datos de medición en la industria alimentaria. El sistema registra datos de temperatura y humedad y puede emitir alarmas vía SMS o e-mail cuando se excede algún valor límite. La versatilidad del sistema lo hace realmente útil tanto para aplicaciones industriales alimentarias como para pequeños negocios y comercios relacionados con la alimentación.
Documentación pulcra y rápida El aspecto crucial durante una visita de un inspector es la documentación de los valores de medición, ya que se debe probar que no se han interrumpido las cadenas de frío. Las mejores soluciones están en
testo , con los versátiles data loggers, por ejemplo, que registran las oscilaciones en la temperatura y la humedad ambiente; o con el sistema de adquisición de datos testo Saveris™ que registra y transmite los valores de esos mismos parámetros automáticamente vía radio o Ethernet a una base central, que es donde se monitorizan y desde la que se emiten alarmas, p.ej. por SMS. Además, el sistema Saveris permite analizar y evaluar cómodamente los datos registrados.
Calibración de los instrumentos de medición Tanto si se trata de mediciones puntuales o a largo plazo, si se miden y registran temperaturas superficiales, del núcleo de los alimentos o las condiciones ambiente, o si se trata de otros parámetros como pH o la calidad del aceite de cocinar; los instrumentos para llevar a cabo estas mediciones deben ser precisos durante mucho tiempo. Para garantizar esta premisa,
testo recomienda que los instrumentos se calibren como mínimo una vez al año. Los laboratorios de calibración
testo o gozan de un reconocido prestigio internacional y están acreditados para elaborar calibraciones en nombre de otras certificaciones, como ENAC o DKD.